Para nosotros, 2018 termina hondamente afectados por los sucesos que se produjeron cerca del estadio San Siro en Milán el 28 de diciembre, cuando, antes del partido de la Serie A entre Inter y Nápoles, barras del Inter atacaron  una caravana de fanáticos de Nápoles y una persona. Uno de los atacantes, fue atropellado y murió atropellado por un vehículo utilitario deportivo (SUV) que pasaba por el lugar. La violencia de los fanáticos había sido planeada, según surge de la investigación, no por un joven violento, – tal vez desahogando su rabia de ser marginado -, sino por un graduado universitario. Esta es una señal de que se ha producido un salto cualitativo en el mundo del micro crimen de las barras bravas en el fútbol. La violencia organizada se está volviendo cada vez más sofisticada y también vinculada a la política. Los clubes en muchos casos se ven obligados a sufrir, sin tomar medidas serias, contra sus propios fanáticos violentos. Pagan las consecuencias.

¿Quiénes son los jóvenes nacidos de políticas equivocadas engendradas en el pasado de los propios clubes?

Asistimos a ver como el aficionado a los deportes, visceral, sanguíneo, casi romántico, del pasado, se ha convertido en un monstruo brillante  y emprendedor.

EL FENÓMENO

Este tipo de violencia no se ve solo en Italia, y desafortunadamente está muy extendida en el mundo. No hay país que sea inmune a los hechos violentos en el deporte. Por esta razón, tenemos la necesidad de que el periodismo deportivo se aleje de los violentos y se involucre en una batalla cultural para curar este cáncer. Nuestra profesión está en peligro y hacer algo, es cada vez más apremiante. Es un fenómeno desgraciado, que no debe ser subestimado. La violencia también está relacionada con el amaño de partidos, no lo olvidemos. Si queremos defender la civilidad, nuestro lugar de trabajo y el de las generaciones futuras, debemos analizar bien cada situación. Y generar las condiciones para denunciar todos y cada uno de los hechos provocados por violentos y quienes los resguardan empobreciendo los contenidos del deporte.

Por ahora, las federaciones y los clubes están haciendo muy poco, y parece demasiado tarde, porque están sujetos a chantajes internos de todo tipo. Por lo tanto, debemos apoyarnos firmemente en aquellos que creen en los principios de una sociedad saludable. No es una batalla fácil, pero es necesaria y urgente.

 

LO POSITIVO

Nuestro 2018 fue positivo. Muchas de nuestras asociaciones nacionales han trabajado muy bien en la defensa de nuestra profesión, han comprendido que es necesario reaccionar y no solo sufrir pasivamente el tsunami de las redes sociales, que están cada vez más en manos de quienes quieren manipular la realidad y las mentes.

Debemos aprender a usar los medios sociales de la manera más correcta, a seguir la lógica de la calidad de la información y la investigación periodística, estudiando más, preparándonos mejor, capacitándonos, jerarquizando la profesión, elevando su nivel.

 

PREMIOS AIPS SPORT MEDIA

El 21 de enero de 2019 en Lausana celebraremos la ceremonia inaugural de los premios AIPS Sport Media Awards. Será una velada muy importante para nuestro futuro, porque se ha hecho una gran inversión en cultura y ya vemos sus resultados positivos. La colaboración con el Comité de Prensa Deportiva de Qatar, nos ha permitido crear un proyecto cultural del más alto nivel y el éxito de la participación en estos premios: tenemos un total de 1273 presentaciones, muestra que existe el entorno necesario para una iniciativa como esta.

Ahora tendremos que dar más importancia a nuestras iniciativas, nuestro objetivo es mejorar las condiciones de trabajo y el espacio para la independencia de todos nuestros colegas.

La independencia de nuestra profesión es una garantía de progreso. Nunca resignarnos, sino reaccionar positivamente.

Feliz Año 2019

 

Gianni Merlo

Presidente de la A.I.P.S.